¿Por qué pasar miedo es tan divertido?

Ahora mismo, la gente está haciendo cola para asustarse, tal vez con un viaje emocionante o una película de terror. De hecho, en octubre de 2015 unicamente, cerca de 28 millones de personas visitaron una casa encantada en los EE. UU. Pero muchos consideran desconcertante este comportamiento, se preguntan, "¿Qué puede ser divertido lo de tener miedo?".

El miedo tiene mala reputación, pero no es del todo malo. Para empezar, el miedo puede realmente sentirse muy bien. Cuando una amenaza desencadena nuestra respuesta de lucha o huida, nuestros cuerpos se preparan para el peligro liberando sustancias químicas que cambian el funcionamiento de nuestros cerebros y cuerpos. Esta respuesta automática dispara sistemas que pueden ayudar en la supervivencia.

Hacen esto para asegurarse de que tenemos suficiente energía y están protegidos de la sensación de dolor, mientras apagan los sistemas no esenciales, como el pensamiento crítico. Sentirse libre de dolor y con energía, despojándose de pensamientos preocupantes que normalmente ocupan nuestro cerebro, todo esto suena muy bien, y puede ser porque esta respuesta es similar, aunque no exactamente igual a la que experimentamos en positivo, de alta excitación, como la emoción, la felicidad, e incluso durante las relaciones sexuales.

La diferencia radica en el contexto. Si estamos en peligro real, nos centramos en la supervivencia, no es divertido. Pero cuando desencadenar esta respuesta de alta excitación en un lugar seguro, podemos cambiar a disfrutar de la  excitación natural de tener miedo. Por eso en las montañas rusas se puede ir de gritar a la risa en instantes. Su cuerpo ya está en un estado de euforia. Solo reetiquetas la experiencia.

Y aunque la respuesta a la amenaza es universal, las investigaciones muestran diferencias entre los individuos en como trabajan los productos químicos asociados con la respuesta a la amenaza. Esto explica por qué algunos son más  propensos a buscar emociones fuertes.

Otras diferencias físicas normales explican por qué a algunos les encanta el mareo asociado con los bucles, mientras que aborrecen la sensación de vacío al caer de una montaña empinada, o por qué algunos chillan con deleite en una casa enbrujada, pero se apartan con terror si se les lleva a un cementerio real.

El miedo conlleva algo más que diversión o excitación natural. Hacer las cosas que nos dan miedo puede darle un buen impulso a la autoestima. Como cualquier reto personal, sea que estés corriendo una carrera o terminando un libro largo, cuando llegamos al final, sentimos una sensación de logro. Esto es cierto incluso si sabemos que no estamos realmente en peligro.

Nuestro cerebro racional sabe que los zombies no son reales, pero nuestros cuerpos nos dicen lo contrario. El miedo se siente real, así que cuando lo hacemos en vivo, la satisfacción y la sensación de logro también se siente real. Esta es una gran adaptación evolutiva. Los que tenían el equilibrio adecuado entre valentía y cautela para saber cuándo hay que enfrentar el miedo y cuándo retirarse fueron recompensados con la supervivencia, nueva comida, y nuevas tierras.

Por último, el miedo puede unir a la gente. Las emociones pueden ser contagiosas, y cuando ves a tu amigo gritar y reír, te siente impulsado a hacer lo mismo. Esto se debe a que damos sentido a lo que nuestros amigos están experimentando recreando la experiencia en nosotros mismos. De hecho, las partes del cerebro que están activas cuando ellos gritan están activas en nosotros cuando los vemos. Esto no solo intensifica nuestra  propia experiencia emocional, sino que nos hace sentir más cerca de aquellos con los que estamos.

El sentimiento de proximidad en momentos de miedo es ayudado por la hormona oxitocina liberada durante la lucha o huida. El miedo es una experiencia emocional poderosa, y todo lo que desencadena una reacción fuerte va a ser almacenado muy bien en nuestra memoria. No quisieras olvidar lo que puede hacerte daño.

Si recuerdas que haber visto una película de terror con tus amigos es positivo y que dejó una sensación de satisfacción, entonces querrás hacerlo una y otra vez.